Un software
detecta expresiones de dolor en recién nacidos
Científicos de la Escuela Paulista de Medicina (EPM) de la Universidad
Federal de São Paulo (Unifesp), en Brasil, desarrollaron un software que
detecta expresiones faciales relacionadas con las sensaciones de dolor en
recién nacidos, que podrá ayudar en el cuidado de los bebés y permitir
intervenciones más ágiles y precisas.
Este programa informático fue concebido en el marco de la investigación
intitulada Desarrollo de un software para la detección de la expresión facial
de dolor de recién nacidos, llevada adelante por Ruth Guinsburg con el apoyo de
la FAPESP.
De acuerdo con Guinsburg, esta iniciativa surgió como consecuencia de la
dificultad que enfrentan los cuidadores de recién nacidos en las unidades de
terapia intensiva (UTI) para el reconocimiento y la evaluación de las señales
de dolor.
“Esa subjetividad termina por dificultar eventuales intervenciones, ya
que existen diversos factores que pueden llevar a los recién nacidos a
demostrar ciertas molestias no siempre relacionados con el dolor. La
investigación torna factible un instrumento útil para el monitoreo del dolor de
los bebés en la rutina de las unidades neonatales”, declaró a Agência FAPESP.
En niños que aún no son capaces de verbalizar, el reconocimiento del
dolor se realiza con base en indicadores conductuales y fisiológicos, tales
como respuestas motoras sencillas, las expresiones faciales y el llanto.
El software concebido en la Unifesp se desarrolló con base en la escala
Neonatal Facial Coding System (NFCS), ampliamente utilizada en el
reconocimiento de los movimientos faciales de dolor, convertida en lenguaje de
computadora por los científicos con la colaboración del Departamento de
Informática en Salud (DIS) de la EPM y de profesionales de la Universidad de
Mogi das Cruzes.
Los mecanismos del programa empezaron a concebirse en 2009, luego de que
el Comité de Ética en Investigación Científica de la Unifesp aprobara del
proyecto. Se filmó a 30 recién nacidos en el Hospital São Paulo entre junio y
agosto de 2013.
El programa informático, desarrollado por científicos de Brasil,
monitorea bebés en UTIs neonatales y puede ayudar a los cuidadores. (Foto:
FAPESP)
“Fue necesario un trabajo sumamente cuidadoso con las familias para que
no hubiese desentendimientos acerca de la captación de las imágenes tomadas
durante procedimientos dolorosos con indicación médica, tales como punción
capilar, venosa o arterial e inyecciones intramusculares o subcutáneas,
necesarios para el cuidado de los neonatos y no realizados con fines de
investigación”, dijo Guinsburg.
Los bebés seleccionados tenían entre 24 y 168 horas de nacidos, y no
presentaban necesidad de ningún soporte de ventilación o sonda gástrica ni
padecían malformaciones congénitas. Los responsables de los mismos firmaron una
declaración de consentimiento para que se realizasen las capturas de las imágenes
que se utilizaron en la investigación.
Durante el período de monitoreo, las expresiones faciales se
fotografiaron en tiempo real con tres cámaras ubicadas a la izquierda, a la
derecha y arriba de los recién nacidos.
El software, basado en la identificación biométrica, mapeó y detectó 66
puntos de los rostros de los bebés, que luego se ciñeron a 16 puntos nodales
principales a partir de los cuales se seleccionaron aquéllos que más se movían
cuando se expresaba el dolor agudo provocado por algún procedimiento médico.
Las distancias entre los puntos sirvieron de base para detectar las
expresiones faciales que, de acuerdo con la escala que se adoptó en la
investigación, demuestran señales de dolor: frente saliente, fisura palpebral
estrechada, surco nasolabial profundizado, boca abierta y boca tensa.
Se identificaron 5.644 imágenes, un promedio de 188 por recién nacido.
Posteriormente, los científicos testearon la concordancia entre los análisis
del software y los de seis profesionales de la salud experimentados en el
reconocimiento del dolor neonatal y con especialización en neonatología. Se
compararon tres imágenes de cada bebé: dos registradas durante el período de
reposo, sin dolor, y una durante procedimientos dolorosos.
“Observamos que el software no detectó expresiones de dolor en un 85% de
las imágenes tomadas mientras los bebés reposaban, sin que se los estuviese
sometiendo a ningún procedimiento doloroso. En tanto, durante la realización de
los procedimientos, en un 100% de las imágenes se detectaron expresiones de
dolor mediante el empleo del programa, mientras que algunos profesionales las
identificaron en tan sólo un 77% de las fotografías”, comentó Guinsburg.
Para Guinsburg, la precisión con que el software detectó las expresiones
permite que éste se erija en un importante instrumento destinado a ayudar a los
equipos de salud de las UTIs neonatales.
“El dolor del recién nacido siempre es visto por otro, depende de una
decodificación del cuidador sujeta al tiempo disponible para el monitoreo e
incluso a factores más subjetivos, tales como la empatía. La automatización de
este seguimiento puede contribuir para con el bienestar de los bebés y ayudar
en el cuidado, llevando a intervenciones más asertivas”, dijo.
Los científicos trabajan ahora en la adaptación del software para el
monitoreo de bebés enfermos, mejorando las cámaras y adecuando el sistema para
su empleo al lado de la cuna.
Los resultados de la investigación
salieron publicados en un artículo de Tatiany Marcondes Heiderich, Ana Teresa
Stochero Leslie y Guinsburg, todas del Departamento de Pediatría y Ciencias
Aplicadas a la Pediatría de la Unifesp, en la revista Acta Paediatrica.
(Fuente: Diego Freire/Agência FAPESP/DICYT)